Este miércoles ha tenido lugar la constitución del nuevo Patronato de la Fundación Fira de Lleida y de la Comisión Delegada de la Fundación Fira de Lleida, con el cese de los anteriores miembros y el nombramiento de los nuevos.
El Patronato de la Fundación Fira de Lleida ha quedado constituido por el alcalde de Lleida, Miquel Pueyo (presidente); el presidente de la Diputación de Lleida, Joan Talarn (vicepresidente primero); el presidente de la Cámara de Comercio, Industria y Servicios de Lleida, Jaume Saltó (vicepresidente segundo), la teniente de alcalde del Ayuntamiento de Lleida Jordina Freixanet (tesorera); la directora general de Comercio de la Generalitat de Catalunya, Montserrat Vilalta (vocal nato); y por Ferran Accensi, Ramon Alturo, Juan Catalán, Francesc Cerdà, Marc Cerón, Ramon Farré, Montse Gallardo, Carlos Gibert, Joan Gilart, Estanislau Grau, Félix Larrosa, Jordi Latorre, Joan C. Massot, Jaume Moya y Antoni Postius (vocales), con Oriol Oró como director general.
En cuanto a la Comisión Delegada de la Fundación Fira de Lleida, ha quedado integrada por Jaume Saltó (presidente), Francisco Cerdá (vicepresidente 1º), Ferran Accensi (vicepresidente 2º), Jordina Freixanet (tesorera), Montserrat Vilalta (vocal nato) , y Ramon Alturo, Marc Cerón, Ramon Farré, Carles Gibert, Joan Gilart, Estanislau Grau y Jaume Moya (vocales).
Apuesta por un nuevo pabellón para Fira de Lleida
El alcalde y presidente del Patronato de la Fundación Fira de Lleida, Miquel Pueyo, ha afirmado que es consciente de que en la Fira de Lleida “hay que modernizar las infraestructuras y hacer un plan viable y estratégico de ciudad”. En este sentido, Pueyo ha añadido que “se asume con responsabilidad y solvencia la modernización de la Fira pero huyendo de grandes obras faraónicas y de endeudamientos que no somos capaces de asumir”.
El modelo que se propone para Fira de Lleida incluye un nuevo pabellón ferial dentro del recinto de los Campos Elíseos (junto al actual Pabellón 4), ordenar y dignificar la zona de aparcamiento y las zonas verdes, cubrir debidamente parte del Pabellón 2 e impulsar un proyecto de transición energética incorporando en la remodelación, por ejemplo, placas fotovoltaicas en la cubierta.
Miquel Pueyo, también ha explicado que, una vez el Pabellón 5 esté construido, se podrían trasladar los servicios feriales del Palacio de Cristal (Pabellón 1) y “plantear seriamente el futuro de este edificio y sus usos”. Pueyo ha destacado la viabilidad de la propuesta, que no supondría transformar en suelo privado los equipamientos comunitarios ni tener que adquirir terrenos nuevos para hacer obras faraónicas, que ya no se estilan en las ciudades del siglo XXI “.